Estoy hecha al revés

No paro de escuchar y leer que no es recomendable controlar la temperatura basal más de tres o cuatro meses. Que lo ideal es hacerlo un tiempo para conocer tu cuerpo y después, con tan sólo tomarla los días claves para ver cómo vas y comparando con tus datos, es suficiente para ir controlando las fases del período. Por lo visto no es recomendable porque suele aumentar la obsesión que se crea en la búsqueda y sobre todo, cuando no se está consiguiendo.

Creo que mi cuerpo va por libre, no puedo ceñirme a ninguna regla porque mis ciclos son diferentes cada vez y parece que el tratamiento, aunque ayuda un poco, no consigue hacer su efecto total. Así que no creo que conmigo funcione el hecho de basarme en datos de ciclos anteriores para averiguar por dónde voy. No es que me preocupe, estoy acostumbrada, pero he intentado entender la gráfica de este mes y creo que no hay por dónde cogerla. Me imagino que el tratamiento influye, y que la toma oral no es la más adecuada, así que tampoco es que me preocupe mucho, estoy aprendiendo.

Se supone que estoy en mi día 8 después de ovular así que estoy en la espera llena de dudas, aunque contenta porque pronto será lo que tenga que ser: o bien me viene la indeseable (ojalá que no) o bien he conseguido el pequeño milagro.

En realidad, me he dado cuenta de que me tranquiliza tomarme la temperatura, ¿será que voy al revés del mundo? Antes, siempre estaba con las dudas, sin saber qué pasaba en mi cuerpo... y ahora gracias a los test de ovulación y la temperatura, mi cuerpo me habla! Me habla en un idioma complicado, pero ahí estoy yo: traduciendo. Y eso me tranquiliza. Parece que hasta pienso menos en el tema y sobre todo, después de saber que he ovulado, porque ya sólo queda esperar. Mi estrés viene cuando no sé qué está pasando, cuándo ovularé, si ovularé o no... porque hace que multiplique mi estado de alerta para no dejar pasar el momento. 

Quizás el día de mañana cambie de opinión y después de meses de temperaturas y tests, lo mande todo a paseo, pero a día de hoy, ha hecho que me relaje y eso es una de las cosas más importantes para que se produzca el encuentro mágico.